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Gracias! Carmen, Rosa y Magdalena porque pudo más en ustedes la Fe Que el miedo, que la valentía de Ellas sea un referente de empuje y esperanza y no sólo un recuerdo.
Que su Testimonio sea para nosotras inspiración y no sólo un gesto admirativo. Que su coraje sea para nosotras una motivación al compromiso y no sólo un hecho que emociona.
Vivamos este día en actitud agradecida y que la entrega de nuestras hermanas mártires sostenga nuestra entrega ahí donde nos encontremos, en el amor que ponemos en lo que hacemos en el ir y venir del cada día.